Ya
se sabe, el rojo es el color más importante en China. Este
color aparece en los muro de la Ciudad Prohibida, en la bandera
china, en las fiestas (sobretodo la Fiesta de la Primavera, el
año nuevo chino) y en actos oficiales como las bodas.
Esta
semana vamos a descubrir el significado del color rojo a través de
un viaje entre mitos, leyendas y tradición.
El
rojo atrae la prosperidad y rechaza el mal
La
leyenda dice que en los tiempos antiguos había un monstruo
llamado Nian (año) que vivía en las profundidades del
mar. A la víspera del año nuevo, Nian salía a la
superficie y devoraba grano, personas y animales de las aldeas
vecinas. Los aldeanos, atemorizados, llamaban ese día Nian Guan
(el pasaje de Nian). No sabiendo qué hacer, ni cómo
deshacerse del monstruo, hacían lo único posible
para evitarlo, se escapaban a la montaña. Una víspera llegó al
aldea un viejo desconocido. Una anciana le avisó que se escpara
a la montaña porque Nian estaba a punto de llegar y si lo
encontrara ahí lo devoraría. El viejo no parecía tener
miedo y sólo pidió a la anciana que lo acogiera en su
casa y lo alojara por la noche, ya que él sabía como
deshacerse de Nian. La anciana aceptó y se fue sola a
la montaña . Llegó la noche y con ella Nian,
hambriento. El monstruo se acercó a la casa de la anciana pero
se detuvo de repente al ver un papelito rojo colgado en la puerta. A
continuación, la noche explotó y Nian se quedó sordo y
ciego por el estrépito de petardos y fuegos aritificiales. Al ver el
viejo forestero vestido de rojo, el monstruo huyó aterrorizado.
Al regresar, los aldeanos pidieron al viejo que les dijera
qué había hecho
para deshacerse de Nian y el viejo dijo que el color rojo, el
estruendo y las luces eran las tres cosas que habian asustado al
monstruo. Los aldeanos siguieron las instrucciones del viejo, y Nian
nunca regresó. Así se ha convertido en tradición colgar
papeles rojos en las puertas durante la Fiesta de la Primavera.
El
rojo es el color del amor
Antes,
en las bodas, la novia se vestía de rojo, cubría su cabeza con
un pañuelo rojo y llevaba unos zapatos rojos con figuras bordadas de
dragón y fénix. La vivienda de los recien casados y el salón
nupcial también son decorados de rojo. Las invitaciones y
las decoraciones como las velas y los centros de mesa, las cajas
regalos y los sobres con dinero son rojos, para augurar lo mejor a la
pareja. Además, el rojo simboliza la alegría, la fidelidad y la
prosperidad. Sin embrago, con la globalización se asiste siempre más
a un proceso de occidentalización de las constumbres, y eso implica
también el matrimonio.
El
hilo rojo
La
leyenda del hilo rojo es difundida tanto en China como en Japón.
Esta leyenda nace al descubrir que la arteria ulnar conecta el
corazón con el dedo meñique. De aquí se empieza a decir que el
hilo rojo del destino unían los meñiques con los corazones,
simbolizando el interés compartido y la unión de lo sentimientos.
Una
de las leyendas sobre el hilo rojo cuenta de un viejo que un anciano
que vive en la luna sale cada noche y busca entre las almas aquellas
que están preestinadas a unirse en la tierra. Cuando las encuentra
las ata con un hilo rojo para que no se pierdan.
Sin
embargo, la leyenda más popular es esta:
Hace
mucho tiempo, un emperador se enteró
de que en su reino vivía
una bruja muy poderosa que podía
ver el hilo rojo del destín,
y la mando traer ante su presencia. El emperador pidió
a la bruja que siguiera el hilo que llevaba atado a su meñique
hasta que encontrara el otro extremo, porque encontrar el otro
extremo significaba encontrar a su esposa. La bruja aceptó
y lo llevó hasta a un
mercado donde una pobre campesina con una niña
en los brazos vendía sus
productos. Cuando la bruja dijo al emperador que allí
se terminaba su hilo, el emperador se enfureció,
empujó la campesina y
hizo caer el bebé, que se hizo una gran herida en la frente. Luego
ordenó a sus guardias que
detuvieran a la bruja y que le cortaran la cabeza. Muchos años
después, llegó el
momento de casarse. Su corte le recomendó
que lo mejor era casarse con la hija de un general muy poderoso. Él
aceptó. El día
de su boda, su esposa llegó
al templo con un vestido hermoso y un velo que le cubría
la cara. Al levantar el velo, el emperador vio que la cara de su
esposa tenía una cicatriz
en la frente, una cicatriz que él mismo había
provocado.
Estas
eran algunas de las interpretaciones más
bonitas del color rojo en China. Conocéis otras?
JS
No hay comentarios:
Publicar un comentario